Romeral House

En una zona residencial del entorno murciano, donde el sol dibuja sombras precisas sobre los volúmenes y la calma del paisaje invita al recogimiento, se levanta Romeral House, una vivienda unifamiliar que reinterpreta el estilo mediterráneo desde una mirada contemporánea y sensorial.

Más que una casa, es un ejercicio de síntesis material y espacial donde la arquitectura dialoga con la luz, el clima y la materia. Un proyecto que se define por su capacidad para crear coherencia a través de la geometría y los materiales, especialmente gracias al uso de distintas colecciones cerámicas de TAU Cerámica, cuidadosamente combinadas para lograr unidad y profundidad.

Un lenguaje de planos, texturas y sombras

Desde el primer vistazo, Romeral House cautiva por su composición volumétrica contundente y elegante. El juego entre pantallas, bandejas flotantes y muros se traduce en una arquitectura que evita la rigidez de la “caja” tradicional. Aquí, cada plano tiene una función estética, espacial y emocional.

Las pantallas de gran formato en Rapolano Almond (120×120) emergen como límites visuales y estructurales, dirigiendo la mirada y enmarcando espacios. Estas superficies cerámicas aportan continuidad tonal y presencia escultórica, al mismo tiempo que actúan como filtros de luz y sombra.

Sobre ellas, las bandejas en Roadstone Linen (90×90) se proyectan como volúmenes flotantes que aportan ligereza al conjunto. En contraposición, los muros verticales en Origin Sand (20×120) suman textura y matices, intensificando la percepción táctil de la arquitectura.

Acceso lateral: arquitectura como experiencia

La entrada a la vivienda se plantea como una pequeña coreografía arquitectónica. Lejos de lo frontal o evidente, el acceso se desplaza lateralmente, proponiendo un recorrido que activa los sentidos. Los muros acompañan, resguardan y generan una tensión espacial que prepara emocionalmente al visitante para lo que está por venir.

Esta decisión revela una voluntad clara: el espacio no solo se habita, también se recorre, se descubre y se siente.

Coherencia material: del exterior al interior

Si hay un rasgo definitorio en Romeral House es su consistencia material y cromática. Desde el exterior hasta el último rincón interior, se despliega una paleta cálida de areniscas, travertinos y madera de nogal, tejida en múltiples escalas y superficies.

Los materiales de TAU Cerámica permiten esta continuidad con solvencia técnica y riqueza estética. La misma cerámica que define los planos exteriores penetra en el interior y se aplica en suelos, muros, escaleras, baños y techos. Esta repetición no es redundante, sino una forma de generar calma, equilibrio y armonía. Como señalaba David Bermejo, “el exterior se introduce al interior”, y esa idea guía toda la narrativa espacial del proyecto.

Uno de los momentos más significativos de esta continuidad es el patio de acceso, donde la vegetación y la luz colonizan el interior. Los muros en Origin Sand, las pantallas de Rapolano Almond y el pavimento en Cosmopolita Sand (90×90) traspasan el umbral arquitectónico y conectan ambas realidades: lo doméstico y lo natural, lo interior y lo abierto.

El agua como recurso emocional

En el diseño mediterráneo contemporáneo, el agua es más que un elemento funcional o decorativo. En Romeral House, la piscina actúa como espejo arquitectónico, duplicando visualmente la vivienda y amplificando la luz.

Su ubicación, alineada con las principales visuales del salón y el jardín, genera continuidad espacial y emocional. El revestimiento en tonos neutros de TAU no solo refuerza esta sensación de frescura y serenidad, sino que invita a una experiencia sensorial completa, donde también el sonido del surtidor acompaña sutilmente la vida cotidiana.

Aquí, sentarse junto al agua es un gesto de contemplación y recogimiento, una forma de conectar con lo esencial a través del diseño.

Movimiento y contradicción formal

Otro recurso expresivo fundamental es la intersección de planos y materiales, donde cada cambio de superficie marca también un cambio de profundidad, textura o ritmo. Piedra y madera dialogan, pero nunca se superponen al azar. Cada serie TAU utilizada está donde debe estar, aportando legibilidad y sofisticación al conjunto.

Uno de los gestos arquitectónicos más sugerentes es la ‘contradicción volumétrica’: volúmenes que parecen flotar sobre planos más livianos, desafiando la lógica estructural tradicional. Este recurso genera sorpresa visual y ligereza conceptual, demostrando que la masa también puede ser poética.

Orden funcional, libertad espacial

Funcionalmente, la vivienda se organiza a partir de dos ejes —longitudinal y transversal— que responden con precisión a la geometría de la parcela. La planta baja distribuye las estancias de día y ocio a ambos lados de un eje vertebral, mientras el salón actúa como bisagra visual y física entre el interior y el jardín. Esta disposición favorece la entrada de luz natural, la ventilación cruzada y el uso eficiente del espacio.

Una arquitectura que respira lugar

Romeral House no busca replicar fórmulas ni adherirse a modas formales. En cambio, se inscribe en una tradición mediterránea reinterpretada: una arquitectura que dialoga con el clima, valora la luz y celebra la materia. Como un oasis doméstico, la vivienda ofrece bienestar, invita a la introspección y permite el encuentro entre lo cotidiano y lo extraordinario.

Porque, como bien resume el espíritu del proyecto:

“Cuando la geometría se vuelve hogar y la luz moldea la materia”.